Teniendo en cuenta que últimamente este blog se ha convertido en un espacio abierto en el que todo el mundo se cree con derecho a decir la suya, yo no voy a ser menos que nadie y amparada en mi alto poder de convicción y en el hecho irrefutable de que mi belleza extrema saca el hipo y tira de espaldas, no en vano soy una super-mega-guay, también voy a decir esta boca es mía y lo hago diciendo que de todo el entorno de Manuel Binoy yo soy la que más lo mima, la que más le cuida, la que más está por él, la que más se preocupa de su bienestar, la única que tiene la capacidad de acariciarlo y de levantarle el ánimo cuando lo necesita, la que siempre está pendiente de sus momentos de debilidad y a la que siempre se le ocurren las palabras adecuadas para devolverle las ganas de salir a correr cuando no las tiene o cuando las ha perdido momentáneamente; lo siento, es así de sencillo, no es pedantería ni falsa modestia; es la verdad ; la naturaleza me ha regalado un cuerpo diez (lástima no poder enseñaros una fotografía), una silueta dotada de proporciones equilibradas y muy bien puestas y una sensualidad natural en mi mirada y en todos y en cada uno de mis movimientos que no hay nadie en este mundo que se pueda resistir a lo que yo digo y a lo que yo quiero que se haga en cada momento; me basta con acercarme a él, susurrarle dos o tres cositas al oído, muy cerca del pavellón auditivo , acariciarle suavemente la espalda (cosa que le encanta) y con la maestría que me ha sido dada acercar y depositar mi mano ahí donde los hombres lo pierden todo para que inmediatamente se deje de tonterías y se ponga en funcionamiento; eso es lo que ha sucedido esta tarde; ha llegado a casa desanimado y sin ganas de salir a correr, desmotivado como muy pocas veces lo he visto; se ha sentado en el sofá, ha encendido la televisión, le he preguntado si le sucedía algo, si algo le preocupaba, si quería que hablásemos de ello; me ha dicho que no, que se sentía cansado, que ya saldría mañana, que todo estaba bien y que no me preocupara y entonces ha sido cuando con carácter de urgencia he empezado a desplegar todas mis dotes de persuasión y la verdad es que una vez más han funcionado a la perfección y han surtido el efecto deseado; a los pocos minutos ya estaba en la puerta de casa, vestido para la ocasión y preparado para salir a correr; el muy cabrón, perdón por la palabra, se ha cascado veinte kilómetros de carrera continua y ahora está más satisfecho y relajado que si hubiéramos echado un polvo divino y con estrellas, perdón de nuevo por la expresión, pero a veces me dejo llevar por la emoción; por cierto, aún no me he presentado; soy la voluntad de Manuel Binoy y aunque no está bien que lo diga yo estoy como un tren de buena, lástima de fotos.
después de veinte Km uno se queda como si hubiera echado no un polvo sino un par de ellos. Buena jornada de entrenamiento!
ResponderEliminarque suerte tienes, mi voluntad no es tan persuasiva
ResponderEliminarJajaja... Mi voluntad quiere ser como la tuya de mayor...
ResponderEliminar¡Un saludo!
Manuel, cuando tu voluntad críe me pido una.
ResponderEliminarNos seguimos.
Después del tute del domingo tu voluntad ha tenido que hacer un pequeño esfuerzo, pero veo que no le ha costado mucho más de la cuenta... Yo creo que te haces de rogar por ella, y que te morías de ganas de salir a correr... ;)
ResponderEliminarLa verdad es que han sido 20 kilómetros "guapos". A eso te referías con lo de la belleza y sensualidad, ¿no?
ResponderEliminarHola Manuel, que suerte tener una voluntad como la tuya, se nota que al que buen arbol se arrima, buena voluntad se lleva....
ResponderEliminarSeguro que Airemi está celosa de tu voluntad...verdad???
Un saludo
Quique
Grande y fuerte es tu voluntad, felices 20 kilómetros
ResponderEliminarHey Manu, vaya fuerza y vaya talento de voluntad!!! buen entreno, esos dias en que la voluntad tiera de uno es cuando al acabar uno sale reforzado a tope....a mi al menos me pasa asi...
ResponderEliminarencantado de tenerte por mi blog, y yo que sin permiso me he quedado por el tuyo lo seguire haciendo pues asi lo vales!!! ejejeje
abrazos
manuel si algun se te desquebraja la voluntad,mandame en un paquete solo un trozo de ella que seguro que con solo un pedazo seria otro .un abrazo
ResponderEliminarJoder! Vaya voluntad! De esas no abundan muchas así que aprovéchala Manuel!
ResponderEliminarManuel, sorprendente siempre. Jo, ya se podía parecer mi voluntad a Lobezno, al prota de 300, a Audrey Hepburn... aunque creo que ni así. Besotes
ResponderEliminarSiempre con esa fuerza y voluntad...sorprendente una vez más.
ResponderEliminarBuenisima esta entrada,mi voluntad esta ahora como yo,conquistada por virus veraniegos.
ResponderEliminarHola Manuel, algún tiempo sin pasar por tu blog y me encuentro con tu voluntad haciendo de las suyas ;-))
ResponderEliminarTienes una voluntad fuerte, me gusta.
Un abrazo.
Encantado, mucho gusto. Pues que siga usted mimando tan bien a nuestro amigo.
ResponderEliminarSaludos cordiales.
Aparte de lo que todos sabemos, después de "eso", no hay nada mas reconfortante que una veintena de kms...un abrazo
ResponderEliminarJajaja..genial, me has puesto cachondo con tu voluntad tio, no tendrá tu voluntad una prima voluntad igual de buena para mi no??..jejeje cada dia te superas no solo en kms. sino tb en cuanto entradas. Viva el Manue y su entradas...que bueno. Un abrazo socio y darle un beso muy fuerte a tu voltuntad de mi parte..jejej
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