El antídoto número dos, salir a correr, está surtiendo el efecto deseado y los catorce kilómetros de esta mañana, con cuestas incluídas, y los diez de carrera continua de esta tarde, han conseguido que mi estado de ánimo remonte el vuelo y se haya estabilizado en los niveles a los que me tiene acostumbrado, bien.
¿Existe acaso un antídoto número 1 que sea más efectivo que salir a correr? Bienvenido de nuevo al mundo de los animados... :)
ResponderEliminarEse antídoto lo voy a llevar a cabo, mañana... quizás por envidia u lo que sea, pero me apetece!!!
ResponderEliminarVuelvo a decirlo, disfrutas con esto como un chiquillo, eres un auténtico maestro de los kms. ¿Cuántas veces estás doblando a la semana?
ResponderEliminarSales mañana y tarde, y la noche que, ¿es que no existe?.
ResponderEliminarMuy bien Manuel, te vuelvo a decir que es admirable tu capacidad de sacrificio, aunque veo que esto para tí ni muchos menos es sacrificado, un saludo.
ResponderEliminarY al séptimo día descansó, no era así?
ResponderEliminarTu mismo ya sabes la receta. no pensar, no pensar, no pensar. Correr, correr, correr. Siempre es buen refugio. Un abrazo y ánimo!
ResponderEliminarGanas tengo de verte de nuevo para tocarte a ver si eres real.... Sigue así, no pares!!!
ResponderEliminarBuen antídoto!!
ResponderEliminarGuardalo bien en el frasco de las esencias y cuando haga falta, unas gotitas!
Un saludo Manuel!!
pedazo de antidoto amigo.eres un crack.
ResponderEliminarsaludos,me alegro de leerte.