martes, 10 de enero de 2012

Hoy mi señor no está fino, no tiene muchas ganas de hablar; la vieja y conocida maldición de sus antepasados empieza a hacer mella en su espíritu; ningún otro visir anterior a él pudo encontrar el antídoto y vivir en la seguridad total y absoluta; cuando ésta tarde he entrado en la biblioteca de palacio y como de costumbre le he  pedido que me explicara las sensaciones que ha tenido corriendo para que pudiera redactar la entrada de hoy, se ha limitado a contestarme: "Lo siento, fariseo, los dioses no me son propicios hoy, me han dejado de lado, tirado como un perro infiel, en la cuneta más alejada, allí donde nadie podrá encontrarme nunca; limítate a escribir que ésta mañana he salido a correr a las seis menos cuarto y que he hecho un total de ochenta minutos de carrera continua; con esto bastará; no está el horno para bollos y el desconcierto de los astros no es que sea de gran ayuda precisamente; todo lo contrario, la soledad del poder puede ser en ocasiones muy difícil de sobrellevar y cruel hasta límites insospechados; hacía muchas lunas que la maldición de los "Le fou" se mantenía alejada de mi persona e ingenuamente pensaba que por fin había podido romper la cadena y pasar a la historia como el primer visir de una nueva era, pero no ha sido así, fariseo, me he equivocado, qué pequeño soy y qué estúpido; toda la seguridad de la que he gozado hasta ahora se ha desmoronado, se ha evaporado entre mis dedos como el humo y como el polvo, como algo que hoy está y mañana desaparece sin dejar  rastro, como si nunca hubiera existido, dejándonos en pañales y desnudos, vacíos de información, como un recién nacido o como una tinaja que todavía está por llenar; la duda, fariseo, huye de la duda, aléjate de ella, que no te toque, que no se te acerque, que no te engañe con falsas promesas; la duda es mala, hace daño, consigue que no te quieras, que te hundas y que acabes paralizado, pensando que lo mejor es no hacer nada y abandonarlo todo; la duda, fariseo, es como una mancha negra que poco a poco te va comiendo y quitándote el aire que necesitas para seguir respirando; sí, fariseo, hoy dudo de todo, hoy la maldición de los "Le fou" me ha cogido bien cogido por los huevos y ella se cree que me los va a reventar, pero no será así, fariseo, no se lo voy a permitir; en el rincón más diminuto de mi yo todavía me queda un resquicio de autoestima que en situaciones como la presente se activa por instinto de superviviencia y le hace frente y hasta el día de hoy siempre he conseguido salir victorioso; por algo soy el gran visir Tintoré "Le fou", dueño absoluto de mi reino y más tozudo que una mula; saldré de ésta, fariseo, que no se preocupen tus ojos, que no se derramen tus lágrimas; mañana después del amanecer volveré a encontrar sentido a todo lo que pienso y utilidad a todo lo que hago; ahora puedes retirarte, amigo mío, déjame descansar, mañana seguimos hablando." Asi ha sido y así se lo he contado.

11 comentarios:

  1. La duda es parte del juego. Dudar es bueno. Y salir de dudas, mejor, eso lo leeremos pronto!

    ResponderEliminar
  2. Así sea Gran Visir; "con un Tintoré hemos topao".

    ResponderEliminar
  3. Vaya prosa le ha salido hoy al Gran Visir.
    Que grandes artículos nos depara este nuevo Tintoré.

    ResponderEliminar
  4. Un mal día lo tiene cualquiera...dile a tu señor que mañana saldrá el sol otra vez.

    ResponderEliminar
  5. Por fin he podido pasarme por el blog, una alegría tenerte otra vez por aquí, a tí o a Le fou o... necesito irme adaptando a los últimos cambios ;-)

    ResponderEliminar
  6. Veo que el gran visir no ha tenido buen día, pero que mantiene la moral alta, lo que le ayudará en las siguientes correrías.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  7. Ja, ja, el gran visir. Me encanta la foto.

    ResponderEliminar
  8. Tienes que ponerte a la labor y escribir un libro, tu si que vales, nos leemos.

    ResponderEliminar
  9. Saludos al gran visir!...ánimo que mañana seguro que será un mejor día

    ResponderEliminar
  10. Manuel me alegro de tu partcipacion en la mitja de Sitges... allí estaremos a ver si podemos hacer un café o una cerveza, pero a cuerpo de Reyes.

    ResponderEliminar